Capítulo 29.

Narra Anne.

Esta mañana Jade me había mandado un mensaje diciéndome que si podíamos quedar por la tarde, supongo que el teléfono se lo había dado Zayn. Sinceramente, si iba a estar como el otro día pasaba de quedar con ella, pero solo por la curiosidad que me trasmitía acepté.
Llego a la cafetería que me había dicho, ahora que me fijo, es mitad cafetería mitad librería. La tía es rara de cojones o es que yo la he cojido manía, una mezcla de las dos.

Jade sentada en una mesa con un libro al lado levanta la mano para que me acerque, lo hago, esta se levanta, estiro la mano para saludarla pero ella me coje del hombro y tira un poco de mí dándome dos besos.

-Menuda bipolaridad.- Hoy me toca a mí estar a la defensiva. Sonríe levemente y con la mano me señala para sentarme.

-¿Quieres tomar algo?.- Me pregunta.- Invito.

-Una cerveza.

-¿Eres mayor de edad?.

-No, pero da igual.

-Se te puede caer el pelo, pero yo lo pido si es lo que quieres.- Estaba por soltarla, ¿a ti qué te importa?, pero ya que parece que tiene modales, me voy a contener.

-¿Para qué me has llamado?.

-Sí, verás, quería disculparme por lo del otro día, no me porté bien, no suelo ser así, ¿sabes?.

-Sí, es que querer tener a dos tíos al mismo tiempo, debe de agotar mucho y claro eso trae un humor de perros.

-Mira, creo que tienes una idea equivocada de mí.

-La que tú me has enseñado.- La interrumpo.

-Ya, pues por eso quiero disculparme, que empezemos de cero si quieres. No voy detrás de ninguno, no creo que esto te incumba pero ayer estuve con Zayn y hemos quedado como buenos amigos, no hay nada, si ese es tu problema.- ¿Qué dice ésta?, pero que problema ni que problema.

-Gracias por la información, pero me da igual.

-Bueno entonces enterremos el hacha.

-Si es lo que quieres, acepto tus disculpas.

-Bien, pues...- Ahora venía eso de ser amigas y lamernos el culo, pues lo llevaba claro.

-Me tengo que ir, mañana tengo un exámen final y apenas he tocado el libro.

-Claro.- Me levanto cojiendo la mochila y cuando voy a echar a andar me para diciéndome.- Espera...mañana me gustaría hacer una cena con todos, estás invitada, ¿qué dices?.- ¡Cómo lo sabía!

-Ya me dices el lugar y la hora por teléfono. Adiós.- Finjo una sonrisa y salgo.

Narra Jade.

Hora, cinco y veinte y la cría está con una cerveza ya en la mano. Esto había sido más dificil de lo que pensaba, estaba a la defensiva, si llego a entrar en el juego acabamos a tirones de pelo, pero era la mayor y la que tenía que llevar el control del asunto. Pago a la camarera y salgo de allí.

Voy a comprar las cosas para la cena de mañana, lo decidí hacer ayer por la noche, con todos. Anne incluida. Harry incluido.
También he decidido que voy a comprarle un regalo a Ruth y a Danielle por todo el apoyo y esas cosas, lo que no sabía era el qué, asi que me decidí por un par de bañadores.
Al ir hacia casa, hoy había ido andando, me encontré con algo que no me esperaba. Estaba claro que le tendría que ver, es mi vecino, pero no lo esperaba. Llegaba con el coche y sacaba dos maletas grandes vacía, supongo que para llenarlas para el tour. ¿Me acercaba y le decía lo de mañana ó le decía a Ruth que le dijera a Niall que le dijera a Harry?. ¿Qué clase de estupidez es esa cuando le tienes a menos de cinco metros?.

Narra Harry.

La había visto, pero quería hacer como si nada, quería hablar con ella, pero no lo iba a hacer, me había hecho un promesa, a Ruth y a Jade. Veo que se acerca, ¿por qué ahora Jade?, sigo con lo mío. La siento detrás, me pongo nervioso. ¿Cómo reacciono?.

-Hola.

-Aaah, no te había visto.- Cierro el maletero.

-¿Podemos hablar?.- Sí, claro que sí, me muero de ganas por hacerlo.

-No puedo, lo siento. Tengo mucho lío.

-Vale, bueno, era solo para decir que mañana a las nueve voy a hacer una cena con todo en mi casa, ya que os vais y eso...Y que estás invitado.- Vamos Harry di que sí, habla con ella, dile que los dos habéis sido unos estúpidos orgullosos.

-Pff, pues me viene fatal, no voy a poder ir.- Su rostro entristece y yo por dentro tengo ganas de pegarme a mí mismo.

-Claro, lo entiendo. Bueno me voy que voy muy cargada.- Mira las bolsas y vuelve a mis ojos.- Ya nos veremos Harry, cuídate.

-Sí...adiós...- La veo alejarse. ¡Estúpido, gilipollas, anormal!. Hay algo en ella, algo a vuelto a la normalidad y por ello es que debe seguir así.

Narra Niall.

-¡Niall!, ¡mira como tienes esto!. Como venga Jade nos echa de casa.- Había tenido la idea de hacer tortitas, pero la harina se me cayó por la encimera, al echar el sirope cayó un pegote de chocolate en el suelo sin querer lo pisé y el suelo estaba pegajoso. En fin una catástrofe.

-Pero y lo buenas que estaban...- Coje la bayeta y empieza a limpiar la encimera.

-Ah, ah. Yo lo limpio, tú vete al salón.

-No.- Dice como un niña pequeña.- Me quedo aquí a ver que limpias.

-¿Qué insinúas?

-Que no sabes limpiar.

-¿Ah no?.- La cojo de la cadera y la siento encima de la encimera.- ¿Cómo lo sabes?.

-Porque eres un chico.

-Menuda machista estás tú hecha. Pues cuando vivamos juntos yo limpiaré y tú colgarás cuadros.

-La casa sería un desastre.- Se acerca a mi cuello y da un pequeño mordisco, cosa que me hace estremecer.

-No vayas por ahí pequeña o acabarás fatal...- No hace caso y sigue, yo ya no sé donde meterme. Me separa un poco la doy un beso en los labios y empiezo a besarla el cuello.

-¡¡Niall!! Jajajajaja. ¡¡Aaahh!! Dios, Niall.

La puerta de casa se abre y se vuelve a cerrar con un portazo que no suena nada bien, por la puerta de la cocina aparece Jade con un gesto de enfado y tristeza, que cuando nos ve cambia a asombro y asco. Ruth se ríe escondiendo la cabeza en mi cuello.

-¿Hola?.- Digo con un sonrisa. Cojo a Ruth y la bajo al suelo.

-Cuando queráis recojer esto, me voy a la cama.- Ruth me mira con una extraña expresión.

-Perdón si te hemos molestado Jade, no era nuestra intención.

-No es por eso Ruth. Me he encontrado con Harry y pasa de mí como de la mierda.

-Mierda, otra vez.- Susurra la pelirroja tapándose la cara.- No puedes abandonar ahora, ya sabías que iba a pasar.

-Ya, pero no pensé lo que me iba a pasar.

-¿El qué?.- Pregunto.

-Estoy enamorada de Harry hasta límites inimaginables.