domingo, 27 de octubre de 2013

Capítulo 27.

Narra Zayn.

Al escuchar lo que Anne acaba de decir me giro a mirarla y abriendo mucho los ojos la digo que no, miro a Jade de reojo que está haciendo exactamente lo mismo con Harry.

-Pues no es mala idea, así nos conocemos.- Responde Harry y se acerca a saludar a Anne. Bajo la mirada rezando para que se vayan, pero no, levanto la vista y siguen ahí.

Anne se acerca a Jade y la dice.- Soy Anne, encantada.- Dispuesta a darla dos besos, Jade se separa y extiende su mano en forma de saludo con el gesto serio, Anne duda unos segundos y responde al saludo.

Esto me pone nervioso, porque se mire por donde se mire tiene pinta de acabar mal, pero en realidad me interesa ver como se comporta Jade y de momento podría decir que está celosa. Hago ademán de levantarme a saludarla, Harry ve mis intenciones y cogiéndola de la cintura hace que se siente. ¡Mierda!

-Hola Jade.- No hay respuesta, solo un simple levantamiento de cabeza, miro a Harry que está mirando hacia otro lado con la mano tapándose la boca para no soltar una carcajada, en estos momentos se podría decir que la sangre me hierve.- ¿Qué tal?. Hace mucho que no te veo.- Insisto.

-Será porque no quieras, ya sabes donde vivo.- Así, sin avisar ni nada, vuelvo a mirar a Harry que hace un esfuerzo sobrehumano para no tirarse al suelo a reir, pero la sonrisa se le esfuma rapidamente cuando Jade le dice.- Harry, para ya, que pareces tonto.- Y ahora el que ríe soy yo.

-Bueno, si queréis pedir ya...mira, la camarera está ahí, ¿la llamo?.- Pregunta Anne amablemente.

-Sabemos pedir bonita, no somos críos.- Contesta Jade levantando la mano para atraer la atención de la camarera.

Anne cierra los ojos apretando los puños y respirando fuertemente. Sí hombre, lo que me faltaba, que la cría se enfade y se coja un berrinche. Para tranquilizarla la acaricio el brazo y la miro a los ojos.

-Zayn, una más y se arma, te lo juro.- Me dice en un susurro. Vuelvo la vista a la mesa donde Harry y Jade miran atónitos.

-¿Habéis pedido ya?.- Pregunto. Harry asiente.

1,2,3,4 minutos de silencio, Jade mira ahcia abajo, Harry simplemente no hace nada y a Anne la va a dar algo de aburrimiento. La camarera trae la comida y los cuatro empezamos a comer, bueno, nosotros continuar.

-Cuéntanos Zayn, ¿cómo conociste a Anne?.- Pregunta Harry. Ya en esto Jade si se interesa, ya que se coloca en la silla y me mira esperando respuesta.

-Pues...larga historia.

-Hay tiempo.- Insiste Jade.

-Iba en el coche y ella en bici, me la crucé y la atropellé, pero no la pasó nada, solo a su bici.- Anne que desde hacía tiempo buscaba cualquier contexto para hablar, lo había encontrado en este mismo instante.

-Bueno, mi cazadora Levis quedó un poco-bastante rota, y diréis, ¿qué el Levis para mí? vale, pero a mí me costó meses de paga, por suerte fue por los codos, asique como ahora se llevan mucho las coderas, mi madre me puso unas de flores. Ahora quedan muy vintage...- Silencio, otra vez. Ahora queda añadir las miraditas que Jade le está echando a Anne. La verdad es que la chica me cae bien, te hace reir aunque solo te cuente no sé qué de unas coderas de flores.

-Debe quedar guay, yo tengo una camisa a flores.- Se une Harry. Dos buenas patas para un banco se han ido a juntar.

-Sí, las flores son lo más. Mi flor favorita es la margarita.

-¿Sí?, la mía es el tulipán azul.- Si no puedes con ellos, únete.

-La rosa es la mejor sin duda. ¿La tuya Jade?.

-No tengo, me dan alergia. Además que importan las flores, las coderas ni nada. Solo hemos venido aquí a comer.- Adiós al entretenimiento y en 3,2,1 ¡PUM!

-Oye maja, ¿tú desayunas All Bran? ¿no?. Pues te lo recomiendo, porque tienes un genio que no hay quien te aguente guapa. Que te molen los dos chicos de la mesa no significa que otras no puedan hablar y juntarse con ellos.- Se levanta.- ¿Sabes algo?. Ahora tienes dos, pero como digas así, te vas a quedar más sola que la una. Ahora vengo, voy al baño.

-¿No podrías haber atropellado a otra más normal?

-Jade, ya vale, es una chica muy simpática, no te ha hecho nada malo.- La defiende Harry.

-Tiene razón.- Digo.

-¡Pues nada! Hoy es el día contra Jade.

-Jade, sabes que no es verdad.

-Déjala Zayn, lleva todo el día igual, se te quitan las ganas de estar con ella.

Narra Ruth.

-Niall, ¿y si no le gusto?, ¿y si no lo hago bien?, ¿y si...

-Y si nada. Mírame, ey, mírame. Lo vas a hacer genial, te vas a llevar estupendamente con ella y la niña te va a parece adorable, ya lo verás todo va a salir bien. Además yo estoy contigo.- Me da un beso corto en los labios y seguimos andando por los largos pasillos del estudio de la mano, hasta que llegamos a un cuarto donde pone ''peluquería''. Niall toca la puerta y yo le agarro más fuerte de mano.

-Pasar.- Se escucha desde el otro lado de la puerta. Niall la abre y entramos.- ¡Hola!. Cuántas ganas de conocerte, soy Lou, encantada.

-Ruth, igualmente.- Nos damos dos besos, miro a Niall y sonriendo me guiña un ojo.

-Bueno chicas, os dejo que habléis. Vengo en un rato.- Sale del cuarto y nos deja allí.

-Siéntate.- Me dice señalando un asiento.- Niall me ha comentado que necesitas un trabajo.- Asiento.- La verdad, no me vendría mal una ayuda en días de mucho lío, como conciertos, premios, galas, pruebas, ya sabes ese tipo de cosas, pero hay otros días que hay poca cosa, peinarse para unas fotos y listo. Si quieres esos días me podrías cuidar de Lux, mi hija. Pagándote, claro está.

-Me parece bien.

-¿Tienes algún horario o algún día que no puedas venir?.

-No, no. Puedo venir y cuidarla cuando me digas, no tengo nada en todo el día.

Estuvimos un rato más hablando del contrato, el dinero, que la verdad es más de lo que me imaginaba. Me dijo que empazara mañana, estas dos semanas cuidaría de Lux y después estaría con ella porque empezaban el tour por Reino Unido.

-Ya estoy aquí, ¿ya lo tenéis?.- Pregunta Niall cuando entra por la puerta.

-Sí, ya está todo.

-Muchas gracias Lou, nos vemos mañana.

Salimos del cuarto y vamos andando hacia la salida.

-Eleanor y Louis están en el Starbuks, me han dicho que vayamos y tomamos algo con ellos.

-Vale, vamos.

Llegamos en coche y al andar hasta la puerta del Starbucks un montón de periodistas se empezaron a acercar corriendo preguntando cosas a gritos y echando fotos. Hubo un momento en el que me quedé atrás rodeada de un grupo de periodistas.

-¿Cuánto llevas con Niall?.

-¿Cómo lo conociste?.

-¿Es verdad que vas a ser su peluquera?.- ¿Como se habían enterado de eso?

Me estaba empezando a poner nerviosa no sabía hacia donde moverme, no sabía donde estaba Niall, los ojos por el puto flash, los oídos por los gritos. Me daban ganas hasta de llorar. Hasta que una mano haciéndose hueco entre la gente me coje la mía y tira de mí poniéndome a su lado.

-Que te me escapas, pequeña. No te separes de mí, ¿vale?.- Aunque me habla con dulzura, en el rostro se le ve enfado, esto no le gusta.

Como podemos y a empujones por todos lados conseguimos entrar, subimos arriba y vamos a la mesa donde están Louis y Ell. Niall se sienta sin decir nada y yo saludo.

-¿Periodistas?.- Me pregunta Ell. Asiento.

-Ya sabías que iba a ser así Niall.

-Ya Louis, ¿pero que le importa a ellos Ruth?. Que me sigan y me pregunten a mí, tiene un pase. ¿Pero a ella?.

-Niall, estoy bien, no te procupes.

-Estos días habíamos estado genial. Mucho estaban tardando en aparecer.

-Si queréis estar juntos, vais a tenerlo que llevar como podáis.- Cometa Eleanor.- ¿Tienes twitter?.- Niego.

-Haces bien. Vamos a pedir y a cambiar de tema.- Dice Louis mirando la carta, pero sé que Niall sigue enfadado.

Narra Jade.

Después que Anne volviera del baño, Harry y ella se pusieron a hablar, Zayn intervenía de vez en cuando pero yo no abría la boca. Pagamos y salimos.

-¿Qué vais a hacer ahora?.- Pregunta Harry.

-La voy a llevar a casa, que sigo teniendo su bici en el coche y luego me iré para casa. ¿Vosotros?.

-Lo mismo excepto lo de la bici.

-No Harry, tengo que ir a trabajar.

-Ahh, cierto pues eso.

Nos despedimos, bueno mejor dicho se despiden y vamos hacia el coche. Una vez allí, conduce hasta la panadería en silencio. Raro en él.

-¿No vas a hablar?.

-¿Qué quieres que diga?

-¿Estás enfadado?.

-Un poco.

-¿Por qué?

-Por tu comportamiento de niña pequeña. Cuando te conocí, no eras así, eso era lo que me gustaba de ti. Te la sudaba todo, decías lo que pensabas y hacías lo que querías. Desde que nos acostamos estás insoportable, no sé. A lo mejor esto no merece la pena.- ¿Por qué eso ha dolido más de lo que creía?.

-No sé qué decir.

-No digas nada. Lo digo yo. Apartas de ti a todo el que te quiere y ¿sabes qué?, me he cansado, asi que esto que teníamos que ni sé lo que es, se ha terminado. Cuando vuelva la Jade de siempre me avisas, ya sabes donde vivo. Hemos llegado, baja por favor.- Hago lo que me pide y con los ojos llorosos en parte por lo que me ha dicho y en parte porque en todo tiene razón, entro a la tienda.

Capítulo 26.

Narra Anne.

-¿Zayn?.

-¿Hola?.

-¡Tendrás valor!. ¡No has guardado mi número!.

-Ohh, eres...sí, aquella chica, ¿cómo...como era tu nombre?. Mmmm...

-Mary, soy Mary.

-¡Eso, lo tenía en la punta de la lengua!.- Este chico es tonto.

-Sí, bueno. Oye mira, tengo poco tiempo porque estoy en el recreo, metida en el baño y no me dejan usar el móvil, el caso es que nos tenemos que ver porque mi bici sigue en tu coche...

-¿Recreo?, ¿no te dejan usar el móvil?. ¿Eres profesora?.- No suelto una carcajada de puro milagro. Anda que cualquiera que me vea metida en un baño con cuidado a no tocar nada porque me da asco, leyendo los ''Te quiero Jimy'' ''Best friends forever'' y las típicas fechas de ''15/4/2008. Siempre'' que están pintadas en las puerta y lo más importante hablando con Zayn que me pregunta que si soy profesora. No sé si debería sentirme alagada o insultada.

-Sí, soy profesora de arte. Entonces, ¿nos podemos ver o no?.

-Sí, claro. ¿Te viene bien si quedamos en Hyde Park?. Te invito a comer.- Lo importante que es la edad. Ha dicho que me invita, ¡qué me invita!.

-Claro, a las dos y media estoy allí. Gracias Zayn, me voy que me toca clase y los chavales se me alborotan. Hasta luego.- Se despide cuelgo y meto el móvil en el bolsilla.- Pff...hahahahahahahahahahaha...¡qué bueno, madre!, ¡ahh, que asco, coño!.- Acababa de rozar el vaquero con la tapa del váter. Salgo, me miro al espejo, me retoco el pelo y salgo al pasillo donde me espera Jenny.

-Vamos, Anne que llegamos tarde a historia.

-Perdona ahora no soy Anne soy Mary y doy clase de arte.- Digo andando hacia clase.

Narra Niall.

-Eh, ¿estás bien?

-Sí Liam, sólo estoy un poco preocupado. Es que la peluquería donde trabajaba Ruth la han cerrado y ahora no va a poder pagar a Jade, ya sabes lo que eso conlleva...Quiero ayudarla pero no sé como...

-Bueno, tú mejor que nadie sabes que nosotros tenemos muchos contactos, seguro que si hablas con alguien la puedes conseguir algo.- ¿Y sí...? ¡Ya lo tengo!.

-¡Gracias tío!. ¡Me has dado una idea!. Luego te cuento.- Le doy una palmada en el hombro y me voy en busca de la persona que me puede ayudar, o al menos, eso espero.

Narra Jade.

-Buenos días chicas. Tengo noticias para vosotras, nos han elegido para que cojamos a diez chicas de primer y segundo curso para trabajar en The X Factor.- Hubo unos instantes de silencio, las chicas se miran las unas a las otras, cuchichean y sonríen. Yo solo hago lo último, que me cojieran sería tan alucinante.- A ver, no he terminado. Los castings son muy duros, empiezan en dos semanas, durarán otras dos semanas. Cada una bailará lo que quiera, siempre y cuando se cumplan unas pautas. ¿Alguna pregunta?.

-¿Es obligatorio?.- ¿Qué mierda de pregunta es esa?, ¿quién no va querer hacer los castings?.

-No, no lo es. Quien no quiera ya sabe donde está la puerta, pero realmente sería estúpido no intentarlo.- Tres de las chicas que estaban allí, cojen sus bolsas y salen de clase con la cabeza baja. La profesora pone los ojos en blanco y vuelve a preguntar.- ¿Algo más que queráis saber?.- Todas negamos con la cabeza.- Está bien, pues empezemos con la clase.

Después de clase, cojo la bolsa, salgo al pasillo y esquivando a las chicas llego a la puerta de la clase de segundo año. Busco a Danielle con la mirada y la veo sentada en una esquina abrochándose los cordones, alijero el paso hasta llegar a su altura. Me mira y lo único que hace es sonreir sabiendo lo que voy a decir.

-¡¿Lo has oído Danielle?!. ¡Es increible!.

-Lo sé, lo sé.- Se levanta y nos ponemos rumbo a los vestuarios.- Pero va haber que trabajar muchísmo, hay mucho nivel, yo estoy más preocupada que nerviosa...

-Pues no deberías, tú ya tienes un pie ellí, eres de las mejores. Yo soy la que no va a tener tanta suerte, pero...- Me encojo de hombros, llegamos al vesturio y nos empezamos a cambiar.- ¿Te puedes creer que hay tres chicas de mi clase que se han ido porque no quieren hacer los castings?.- Suelta una carcajada y me dice.

-Pues mira mejor, más posibilidades para las demás. ¿Vamos?.- Asiento termianando de guardar las cosas.- Ya verás cuando se lo cuente a Liam...- En ese instante y sin quererlo se me viene a la cabeza Harry, ¿qué más me da a mí? sí yo no se lo voy a contar y si se lo cuento no le va a importar.- Seguro que si se lo cuentas a Harry se alegrará mucho por ti.

-Bueno...- Solo me sale sonreir falsamente, tengo que dejar de pasar tanto rato con ella.

Narra Niall.

-¿Puedo pasar?.- Asomo la cabeza dentro del cuarto.

-Claro, pasa. ¿Qué necesitas?

-Verás Lou, esto me resulta un poco vergonzoso...

-¡Venga Niall!. Estamos en confianza.

-Ruth mi novia, es peluquera y donde trabajaba han cerrado, yo me preguntaba si...necesitas una ayuda o algo para lo que sea.

-Pues la verdad me vendría bien y el día que no haya mucho trabajo por aquí se puede ir a casa a cuidar de Lux, que me haría falta, así no la dejo de pagar en todo el mes, si la parece bien.

-¡Claro, sería estupendo!. Esta tarde va a venir aquí te la presentaré y ya habláis sobre en tema. ¿Te parece?.

-Vale, por aquí la esperaré.

-Muchas gracias Lou, la vas a hacer muy feliz.- Me acerco a abrazarla.

-No hay de qué.

Salgo contento del cuarto y llendo hacia donde están los chicos saco el móvil, busco el número de Ruth en la agenda y la llamo.

-Hola babe.

-Hola.

-Voy a ir dentro de poco a buscarte, ¿sigues en mi casa?.

-Sí cielo, ¿no te importa no?.

-No, claro que no, ¿cómo me va a importar?. En media hora estoy por allí. Hasta ahora, te quiero.

-Vale, adiós. Te quiero.

Narra Harry.

Esperando apoyado en la puerta del coche, según mi reloj debía de estar aquí el tres minutos y cuarenta segundos exactos. ¿Desde cuándo me ha importado tanto cuando llegase una chica?, era la chica la que me esperaba a mí. Montones de chicas empiezan a salir levanto la cabeza buscándola, no, no, ¿es esa? no, es muy alta. Finalmente veo a dos chicas conocidas, una se aleja montándose en el coche de otra chica y la que a mí me interesa cruza la calle sin haberme visto aún, me acerco a ella, me pongo a su altura y la digo.

-¿Me has echado de menos?.- Me mira de reojo y pone los ojos en blanco.

-Te dije que no vinieras...

-Yo también me alegro de verte. Tengo allí el coche, vamos.- Para en seco y queda en frente mía.

-¿Quién te ha dicho que quiera ir contigo?.

-¿Ahora vienes con esas?. ¡Venga ya!. ¡Estoy harto de tus tonterías, me quieres para lo que te interesa!. Jade tiene miedo, ahí está Harry. Jade necesita ayuda, ahí está Harry. Jade está mala, ahí está Harry. Harry necesita o quiere algo, Jade no aparece por ningún lado.

-Harry...era una broma...- Creo que la he asustado subiendo el tono.

-¿Por qué no le haces esas bromas a Zayn?. Porque a él bien que le cuidas.- Sus mejillas se tornan rojas, pero yo no diría que de veguenza sino de rabia.

-¿Tú sabes hace cuánto no hablo con él?. ¡Semanas!, hasta he perdido la cuenta. Con él no he hecho ni la mitad de lo que he hecho contigo, hasta me habías confudido cuando creía que tenía los sentimientos claros hacia él. Puede que no sea perfecta, ni lo rozo, lo sé. Pero sé cuando una persona se interesa por mí y me quiere...

-¿Entonces por qué me tratas así?.

-¡No lo sé!. Es un mecanismo de defensa, no quiero enamorarme de ti y sufrir, sabes que lo nuestro sería complicado, tenemos personalidades muy chocantes. ¿Que haríamos Harry?.

-La pareja perfecta.- La hago soltar una pequeña sonrisa.

-Creo que será mejor que me vaya...- En este momento no sé que hacer, ¿dejo que se vaya y que esté medio enfadada o la retengo y la invito a comer?.

Narra Ruth.

-Babe, ya estoy aquí.- Oigo a Niall desde el baño.

-Vo...voy...- Sí, he estado llorando y me siento estúpida por ello, pero creo que se me viene todo encima y la persona que más me ayudaba en estos casos ya no está. Dejémoslo en que han sido un cúmulo de cosas. Aparezco en el salón y lo veo sentado en el sofá.

-¿Nos vam...?. Hey, ¿has llorado?.- Se levanta y se pone a mi altura, asiento y bajo la cabeza enterrándola en el pelo.

-Es que Niall, cada vez que lo pienso es un sin vivir...

-Pues ya no hace falta que lo pienses, he hablado con nuestra estilísta y te va a conceder un trabajo. Después de comer iremos a verla para que habléis.- Se me curva una sonrisa de oreja a oreja. Niall me coje la cara con las manos y me quita el resto de lágrimas de los ojos.- ¿Estás contenta?.

Le cojo las mejillas con las manos dándole un beso en los labios y asintiendo.

-Gracias Niall, gracias. No sé que hacer para darte las gracias.- Sonríe me coje de la cintura y me apreta contra él.

-Sencillo, darme un beso y dercirme que me quieres.- Atrapo sus labios con los míos y le doy un beso apasionado.

-Te quiero muchísimo.- Digo aún en sus labios.

-Yo también babe.- Me vuelve a besar pidiéndome paso con su lengua, cosa que acepto. Una lucha entre bocas se desata, empieza a acariciarme la espalda de arriba a abajo y mete las manos por debajo de la camiseta. Esto se me va de las manos.

-Ni...Niall. ¿Nos vamos?.

-¿No quieres que nos quedemos aquí?.- Levanata las cejas.- Por ti interpongo Nando's.

-Que romántico por tu parte y venga vamos que tengo hambre.- Mentira, lo que tengo es el estómago en un puño.

Narra Jade.

-...Espera, no te vayas, te invito a comer.- ¡Mierda!, da igual que le trate mal, bien, regular, él siempre me trata así, ¿por qué me haces esto señor?.

-Creo que mejor otro día...

-Venga Jade, lo pasaremos bien, conmigo siempre lo pasas bien.- Lo dudo, esto va a acabar mal, lo sé.

-¿Por qué eres así?.- Juro que no lo puedo entender.

-Porque me gustas y ya, ¿esto no me lo has preguntado antes?.

-Puede, pero es que no lo logro entender.

-Bueno, pues ya lo entenderás cuando sientas con alguien lo que yo siento por ti.- Creo que voy a avomitar...- ¿Vamos o no?.- ¿Qué hago?, en este momento en mi mente solo hay contradicciones, ¿voy, no voy?.

-Vamos, pero nada de bromas de mal gusto, discusiones o piques. Una comida entre amigos.- Iba a seguir hablando pero me corta.

-No, amigos no. Yo no quiero ser tu amigo, lo siento.- Vale, más claro agua.

-Pues entre....personas que se tienen....personas que se tienen cariño, ¡sí, eso!.- Pues no ha quedado tan mal.

-Lo que tengo que aguantar, señor.- Dice mirando hacia arriba y sonriendo levemente. Me mira de reojo y me pasa el brazo por los hombros hasta el coche.

Narra Zayn.

Al llegar a Hyde Park busco a la chica, bueno, lo poco que recuerdo de ella, además irá con otra vestimenta, lo que me limita un poco más la busqueda. Lo que si que recuerdo bien es su voz, su sonrisa concretamente, no se ni el por qué, pero me resulta muy curiosa, es como cuando intentas hacer a una niña pequeña reir porque está llorando y cuando lo consigues te sientes como si fueras un dios griego.

Voy andando mirando hacia un lado y otro, nada, que no la encuentro, decido sacar el móvil para llamarla, pero ya no hace falta, escucho su risa escandalosa en frente. Levanto la vista y la veo hablando animada con un chico, el típico chulito. Me acerco y me pongo a su altura.

-¿Qué quieres chaval?.- Me dice el chico, si es que lo sabía, menudo gilipollas. Antes de que diga nada, Mary se interpone.

-Déjalo Zac, es Zayn un...¿amigo?.- Asiento no muy convencido.- Sí, un amigo.

-Menudos amigos te buscas Anne.- Sí desde luego, mirándote a ti. Espera, espera, ¿qué?.

-¿Anne?.- Me mira con una sonrisa fingida y cambia de tema rapidamente.

-Bueno Zac, nos vemos mañana.- Se acerca y le da un beso en la mejilla.

-Hasta mañana, y tú.- Dice señalándome.- Cuidado con como la tratas, a ver si te voy a tener que mandar al hospital.- Se aleja sin dejar que le conteste.

-Asique Anne...

-Que majo es Zac, bueno y está como un cañón el tío.- Dice andando a mi lado.- Pero emm, es un alumno eeh, no te pienses...

-¿Cuántas mentiras me quieres colar?.

-Bueno, tecnicamente te las he colado.- En eso tiene razón, por telefóno caí como un tonto.- Pero no importa, te perdono.

-No, te perdono yo, que has sido tú la que me has mentido.

-No, te perdono yo, que no te acordabas ni de mi nombre.- Se para en seco.- ¡Aquí Zayn, aquí!. Porfa, vamos a comer aquí.

-¿Comida francesa?.

-Sí, aquí hacen la mejor Quiche de todo Londres y las crepes ya ni te cuento.

Me acaba convenciendo, entramos y elegimos una mesa que esté un poco alejada, por lo de las cámaras y eso. Nos sentamos pedimos de beber y empezamos la conversación que yo quiero.

-¿Me vas a contar lo que haces con tu vida? Anne.- Recalco el nombre lo que la hace reir. Esa risa...

-Te dejas engañar muy fácil, muy mal Zayn. A ver, me llamo Anne y no soy profesora de nada, voy al instituto, el año que viene empiezo Bachillerato.

-Pero, ¿qué edad tienes?.

-Voyacumplirdiecisiete. ¿Pedimos?.- Lo único que entiendo es ¿pedimos?.

-No, dime tu edad.

-Dieciseis Zayn, dieciseis. Perdona.- Levanta la mano para atraer la atención de la camarera, esta se acerca.

-Pediremos dos Quiche y una tabla de quesos, por favor.- La camarera apunta lo que ha pedido y se aleja.- ¿No vas a hablar?.

-Creí que eras mayor.

-Ya, todos lo dicen.- Silencio, silencio y más silencio.- Pues nada...

-¡Eres una cría!.- No me lo podía creer, todo es tan raro.

-Bueno ya está bien. Sí seré una cría, pero a ti te tiene que dar igual, yo solo quiero mi bici. Te da igual mi edad, no vamos a ser nada, ¿no?.- Antes de que pudiera reaccionar cambia de tono y dice.-Mmm, la comida ya está. ¡Qué aproveche!.- Se tira a su plato y empieza a comer. Lo dicho, una cría.

Narra Harry.

-¿Qué tal si entramos aquí?, dicen que hacen la mejor Quiche de todo Londres.

-Vale, me da igual.- Que paciencia señor mío.

-Mira Jade si vas a estar así te dejo en tu casa...

-Vale, tienes razón, lo siento. Vamos.- Abro la puerta dejándola pasar y detrás de ella voy yo. Entramos y buscamos una mesa un poco alejada, hasta que mis ojos ven algo que no pueden crear.

Creo que todos nos miramos pero todos queríamos hacer que no nos habíamos visto, hasta que esa chica que está con Zayn habla.

-Ey, mira Zayn, tu amigo Harry con esa chica. Hola.- Nos dice.- Sentaros con nosotros, no importa, ¿verdad Zayn?.

sábado, 26 de octubre de 2013

Capítulo 25.

Narra Ruth.

Miércoles por la tarde, me dirijo hacia la peluquería para trabajar. Desde el domingo que Niall me pidió salir no le había vuelto a ver ya que estaban con entrevistas y empezaban los ensayos del tour, le echo mucho de menos pero lo entiendo ya que es su sueño y a parte hablamos todos los días.

-Buenas.- Saludo al atravesar la puerta de la peluquería, dejo el bolso en el perchero y veo salir del cuarto a la dueña del local, seria, enfadada, pero a la vez triste.- ¿Ha pasado algo?.- Pregunto preocupada, ya que ella siempre es muy optimista y alegre.

-Verás Ru.- Siempre me llama así.- Esto se acabó, cerramos bonita.- Me quedo mirando un punto fijo sin inmutarme, ¿ya está?.

-¿Así, sin más?

-Cariño, sabes que esto ya no iba a ningún lado por mucho que quisiéramos renovarlo, no puedo pagarte, ni siquiera puedo pagarme a mí.- Muchas cosas pasaban por mi mente, como que le diría a Jade, pero sobre todo me daba pena por ella había puesto hasta su alma en este proyecto hasta los últimos meses ella se había quitado parte de su sueldo para poder pagarme a mí todo el sueldo.

-¿Qué va a pasar contigo?.

-Por mí no te preocupes, tengo un puesto en el restaurante de mi hermano, la pregunta es. ¿Qué va a pasar contigo?. ¿Qué le vas a decir a la chica esa?.- Se refería a Jade. No lo sabía, pero lo que si sabía es que ella no me iba a dejar en la calle, de eso estaba segura o bueno casi segura.

-No te preocupes, ya se me ocurrirá algo...

-Si necesitas ayuda ya sabes donde estoy, haré lo que pueda...- Con tal de que ella tenga un sueldo para sus hijos me daba por satisfecha.

-Lo haré.- Me acerco a ella, nos damos un cálido abrazo, miro a mi alrededor, todos los momentos que he pasado aquí y todo lo que me han enseñado en este lugar no tiene precio y nunca lo olvidaré.

Narra Zayn.

Por hoy, era suficiente, llevabamos toda la mañana con ensayos y después de comer de acá para allá con entrevistas, pero por fin, las ocho de la tarde y nos podíamos ir a casa. Después de despedirme de los chicos y el equipo, me monto en el coche y pongo rumbo para casa, un pitido, otro pitido, otro pitido...¡maldito Whatsapp!. Meto la mano en el bolsillo, ¿dónde está?, la meto más al fondo, ¡lo tengo!, lo saco echando el culo hacia arriba, lo desbloqueo. ¡No me lo puedo creer!, ya la dije que no quería nada, ¿por qué me haces esto Perrie?, leo el mensaje: ¿Podemos vernos?, no claro que no, bloqueo el teléfono y bajo la mirada para dejarlo en el asiento del copiloto. ¡Crack! ¡Pum!. Choque y caida, levanto la mirada, abro los ojos deseando que sea un sueño y bajo corriendo del coche hacia la chica.

-Ey, chica, ¿estás bien?.- La agarro de la nuca y la ayudo a sentarse. Gracias a Dios no la ha pasado nada.

-¿Dónde mirabas?. ¡Te has comido el stop!

-Lo siento, pero no deberías ir por la carretera con bici, es peligroso.

-Y tú no deberías ir a haciendo otras cosas que no sean estar atento de la carretera en el coche, es peligroso.- Dice haciéndome burla. Vale, tiene razón. Otra razón más por lo que Perrie no me trae más que problemas, ¡la podría haber matado!.

-Bueno, da igual. ¿Cómo te encuentras?.

-Me duele el tobillo, ¡madre mía, no puede ser!.- Dice mirándome, y ahora es cuando venía lo de eres Zayn Malik de One Direction, ¡aaaaaah!.- Mira como me has dejado la bici, está destrozada, pero lo peor no es eso, lo peor es la cazadora, ¡es Levis!, ¡fueron seis meses de paga!.- Mierda, craso error.

-Mueve el tobillo, no se te vaya a hinchar.

-Sí, sí, lo muevo, lo muevo. Vamos ayúdame a meter la bici en tu maletero, nos tenemos que ir.

-¿Cómo?.

-Oye, tú te has comido el stop, tú te has cargado mi bici y da gracias a que paso por alto lo de la cazadora. Vamos al polideportivo, tengo entreno y ya llego tarde.- La ayudo a meter la bici en el maletero confuso, totalmente desorientado, ¡está haciendo conmigo lo que quiere!. Se mete en el coche.

-Claro, pasa, pasa. No hay problema.- Digo con ironía. Arranco el coche y conduzco por donde me dice.

-Por cierto, soy Anne, encantada. Tú eres Zayn, no hace falta que te presentes.

-Vale, bueno pues igualmente. Ahora si no te importa quita los pies del asiento, luego se queda la marca y lo tengo que limpiar.- Suelta un bufido y quita los pies.

-Hemos llegado, mira aparca....¡ahí, ahí!.

-Vale, bueno pues hasta otra Anne.

-Já. Vamos, tienes que entrar, después me tienes que llevar a casa, está a una hora y media de aquí y no tengo suficiente para un taxi. No querrás que te denuncie, imagínatelo.- Hace la forma en el aire como si estuviera haciendo una exclusiva.- Zayn Malik, denunciado por llevarse a una chica por medio...Estaría bien, ¿no?.

Vamos, que al final acabé aceptando por mi propio bien y ahora estoy sentado en las gradas mientras que ella y sus amigas, compañeras o lo que sean están haciendo entrenamiento de Volleyball, no lo hace mal la chica, tiene buenos movimientos. Bueno claro, contando que ella es la que más hace porque le da igual que esté aquí sentado y las demás no hacen más que mirarme y ponerme ojitos.


Narra Niall.

Llego a casa, bajo del coche y veo a una chica pelirroja sentada en la puerta de mi casa con las manos tapándose la cara, no es cualquier chica pelirroja, es mi chica pelirroja, ¿está llorando?, acelero el paso hasta ella y me pongo a su altura.

-Eh, eh pequeña, ¿qué pasa?.

-Ni...Ni...me...

-Vale, vamos, vamos para adentro.- La cojo del la cintura y la levanto abrazándola, nos acercamos a la puerta, busco las llaves y abro la puerta. La acompaño al sofá la ayudo a sentarse y me siento a su lado pasándola un brazo por los hombros y con el otro brazo la quito algunas lágrimas y la aparto algunos mechones. Silencio, es todo lo que había en toda la casa, solo se escuchan los sollozos de Ruth y eso me destroza por dentro, siento impotencia. Me mira e intenta sonreir y me echa el pelo hacia un lado.

-No te...no te preocupes cariño. Es una tontería, bueno, en realidad, no, no lo es. Me han echado Niall, ya no tengo trabajo. ¿Dónde voy a vivir ahora?. No tengo ningún lugar Niall, no sé que hacer.- Al oir eso me tranquilizo, a ver, es algo malo, pero podría ser muchísimo peor.

-No va a pasar nada...todo se va arreglar, te conseguiremos un trabajo, hablaremos con Jade y si necesitas dinero yo te puedo prestar, podemos hablar con tus padres y contarles que...- Me interrumpe.

-Mi padre está en la cárcel y mi madre falleció.- Dice de repente y del tirón, cosa que me cuesta asimilar.

-¿Có...cómo?.

Narra Anne.

-Las traías locas a todas, las tendrías que a ver visto en el vestuario, parecían gatas en celo.

-Baja los pies...

-¡Pareces mi padre!. A la izquierda Zayn.- Hace lo que le digo.- Bueno...hemos llegado...

-Bien...

-¿Sabes? Te daré mi número.- Quiero darle mi número pues se lo doy.- Eh, ¿juego bien al volley, verdad?.- Suelta una carcajada.

-Bueno, no entiendo mucho sobre ello, pero sí, lo haces bastante bien.

-Cuando empiece el torneo, te invitaré. Oye, ¿me das tu número?.

-No sé si debería, ya sabes, no te conozco...

-Ohh, vamos, que es lo pero que puede pasar ¿que lo cuelgue en internet?.

-Está bien, te lo daré. Pero ten cuidado con lo que haces, sé donde vives.- Reimos, nos despedimos y me bajo del coche subiendo al portal de mi casa.

Narra Niall.

Después de que me contara todo lo vivido, acabamos los dos llorando y al final en vez de consolarla yo a ella acabó consolándome ella a mí. Estabamos en el sofá mirando la tele y viendo nada, mientras que ella me acariciaba el pelo y yo el brazo, me tumbo con la cabeza en sus piernas y la miro desde abajo.

-¿Quieres quedarte?, mañana tengo que salir a las ocho y media , pero tú puedes quedarte hasta cuando quieras.

-¿Voy a dormir contigo?.

-Claro babe, ¿dónde si no?.

-Entonces vale.- Agacha la cabeza y me da un dulce beso volviendo la mirada a la pantalla.

Narra Jade.

Busco la chaqueta me la pongo rapidamente, cojo el paraguas, las llaves y el móvil y abro la puerta, cruzo la calle mirando hacia ambos lados con miedo y llamo al timbre. Vamos, vamos...la puerta se abre y deja ver a un Harry en calzoncillo y con el pelo alborotado, lo que me hace reir por dentro.

-¿Qué haces aquí?

-¿No lo oyes?. Es muy fuerte.

-Jade, es una tormenta, no el fin del mundo.

-Ya pero me da miedo estar en casa sola cuando hay tormenta y Ruth no tiene consideración, me ha dejado sola.- Suelta una carcajada y se hace a un lado para que pase, pasa detrás de mí y cierra la puerta.

-Dame un beso.- Dice cogiéndome de la muñeca para que le mire. Niego con la cabeza.

-¿Sabes que me has despertado y mañana tengo que irme pronto?, me debes un beso.- Me acerco a su mejilla y le doy un dulce beso.- Así no progresamos, ¿eeh?.

-Yo creo que sí.- Digo encojiéndome de hombros. Vaya si lo creo, cuanto más paso de él más quiere de mí y más se enamora. ¿Pero Jade qué dices?, eso es cruel. La mano de Harry por delante de mi cara hace que salga de mis pensamientos.

-Sube a mí habitación, yo dormiré en el sofá.- Dice señalándolo.

-Oye...Harry, no hace falta. No será la primera vez que dormimos juntos, mientras que no pase nada raro...

-¿Ves?. Así, sí progresamos.- Acaricia mi cabeza y subimos las escaleras los dos. Al llegar a su habitación se acuesta en su lado. Lado izquierdo y yo al otro lado, al lado de la ventana. Así para ver bien los rayos.

Creo que habían pasado diez minutos y yo aún seguía con los ojos como platos, no es que esté incómoda pero, tengo miedo y no es mi cama, bueno y también influye la persona que tengo al lado, me doy la vuelta para mirarle la espalda. ¿Por qué ahora de repente siento esto?, no me puedes hacer esto, tu y yo éramos uno. Mi cabeza y mi corazón hablando.

-¿No puedes dormir?.- Susurra sin darse la vuelta. ¡Qué susto!.

-No, no sé que me pasa.

-Pues está muy claro, te pongo nerviosa.- Se da la vuelta quedando en frente mía.

-Si tú lo dices...- Exactamente, es lo que me pasa.

-¿Qué tal con Zayn?.

-¿A qué viene eso ahora?.

-No sé, quiero saberlo.

-No sé, Harry. Estoy confusa ahora.- Hace una mueca con la boca, se acerca más a mí juntando su cabeza a mi cuello y dejando un beso en él.

-Duérmete pequeña.- Me pasa un brazo por encima y me quedo dormida sintiendo su respiración relajada en mi cuello.

Narra Anne.

-Buenos días.- Digo cuando llego a la cocina donde mis padres y mi hermano pequeño están sentados desayunando.

-Buenos días.- Contestan.

-Hija, si quieres podemos llevar la bici esta tarde cuando llegue de la oficina a arreglar.

-¡Hostias!.- Grito y después empiezo a toser porque el café se me ha ido para el otro lado.

-¡Niña esa boca!.

-Perdón mamá...La bici...eh...sí, me la he dejado en el maletero de aquel chico.- No le había dicho quien era el chico.

-Pues ya estás a por ella porque fue bien cara y seguro que tiene arreglo.- Bueno, guay, quedaré con él.

Narra Niall.

-Babe.- La acaricio el brazo.- Babe...me tengo que ir...- La beso la frente.

-No quiero que te vayas.- Me coje el cuello con sus manos y tira de mí hasta que nuestras narices quedan juntas.

-Yo.- La beso.- Tampoco.- La beso.- Quiero irme.- La doy un beso más largo.

-Cariño, ¿nos vamos a ver esta tarde?.

-Pues...no lo sé. ¿Quieres que quedemos para comer y después te vienes conmigo al estudio?.

-¡Vale, sí!.- La doy un último beso y me voy dejándola allí.

Narra Jade.

Lo de abrir los ojos, ver que Harry está a mi lado y levantar la sábana para mirar por debajo se estaba convirtiendo en una costumbre. Esta vez respiro aliviada, me despejo y me levanto para cojer mis cosas e ir a casa a prepararme.

-Ehh, ¿ a dónde vas?.- Me pregunta asomando la cabeza cuando estaba a punto de salir de la habitación.

-A mi casa, tengo que ir a clase, ¿tú no te tenías que ir?.

-Sí, espera que te acompaño abajo.- Se levanta sin ganas, le espero en la puerta y cuando está a mi altura me agarra de la cintura, me da un beso en la frente y me dice.- Buenos días.- He de reconocer que me he muerto por dentro, cuando menos me lo espero se vuelve cariñoso, adorable...- Oye, si quieres nos quedamos en la cama...- ¡Hala!. Ya la ha jodido.

-No te dura nada.- Pienso en voz alta.

-¿El qué?.

-¿Ehmm?. Nada, nada.

-Vale...¿quieres desayunar?.

-No Harry, gracias. Me tengo que ir ya.

-Bueno, pues me debes una cita.

-Sí, venga, lo que tu digas, campeón.

Abro la puerta de casa, voy a salir pero me para diciéndome.

-Te olvidas de algo.

-No, lo he cogido todo.- Le vacilo.

-Ya, pues otra cosa.

-No Harry, no me olvido de nada.- Salgo andando pero él detrás mía, me coje, me da la vuelta y me dice.

-No te voy a soltar hasta que lo hagas.

-Genial, pues nos quedamos aquí todo el día.

-Por mí ya ves tú, yo estoy muy cómodo.- Apoya su barbilla en mi hombro.

-Ay...venga Harry, suéltame.- Le empujo poniéndole las manos en el pecho pero no surge efecto.

-Ay...Harry.- Dice intentando imitarme.- Pareces una niña pequeña.

-No me hartes. ¿Qué pasa?. ¿Qué siempre tiene que ser lo que tú digas?.

-No te creas...tú tampoco das tu brazo a torcer.

-¡Aggh!.- Me acerco a él, le voy a dar un beso en la mejilla, pero gira un poco la cara y acaba siendo em la comisura de los labios.

-Así me gusta, ya se puede ir la señorita.- Empiezo a andar hasta la puerta con paso firme y cuando voy a entrar me grita.

-¿A qué hora sales?.

-No te importa.- Le respondo con el mismo tono.

-Vale, me enteraré de todas formas.

Capítulo 24.

Narra Harry.

Me levanté, desayuné y ahora me vestía. No sabía que hacer hoy Liam, Louis y Niall habían quedado con las chicas y con Zayn no me apetecía quedar aunque no tenía ningún problema con él, las cosas no estaban como para tensarlas mucho. Al pensar eso, se me viene a la cabeza Jade, ¿qué estará haciendo? porque de seguro está sola. Bien ya sé donde iré, pienso con una sonrisa.
Después de hacer alguna cosa más por casa me dispongo a salir, cruzo la calle y llamo al timbre de la casa de Jade. La puerta se abre y deja ver a una chica con las mejillas y la nariz roja y con los ojos caídos, envuelta en una manta y con el pijama puesto. Se hace a un lado para que pasa, lo hago y cierro la puerta, ella vuelve al sofá para acomodarse y me dice.

-Esto...- apenas puede hablar, lo que me hace gracia.- No te rías, esto es tu culpa.

-Eh, eh, dos cosas importantes, yo no elijo el tiempo y no te obligué a pararte en mitad de la calle, sino todo lo contrario, te dije que nos fueramos.- Me siento a su lado y la toco cuidadosamente la frente.- Tienes fiebre, ¿tienes termómetro?.

-No, pero da igual.- Se acerca a la cocina y empieza a abrir cajones.- ¡Joder!, no tengo pastillas.- Se pasa las manos por la cara.

- ¿Quieres que salga a comprar?.

-Da igual, me hago algo caliente.

-Pues no se el qué cariño, tienes la nevera practicamente vacía.- Digo mirándo dentro de ella.- Voy a comprar, anda.

-Que no, da igual. Llamo a Ruth.

-¿Tú que quieres que cuando vuelvan nos maten?. No seas tonta, tú túmbate que yo vuelvo en un rato. Me llevo las llaves.- Beso su frente y salgo a por el coche.

Narra Ruth.

-Espera, antes de bajar te tengo que poner esto.- Saca un pañuelo de la guantera y me tapa los ojos.

-Niall...- Me quejo, no me gusta que me tapen los ojos.

-Vamos, será solo un momento.- Me bajo del coche, lo rodeo para llegar a su puerta abrirla y sacarla de la mano.- Espera aquí un momento que voy a coger unas cosas.

-Vale.- Cojo las cosas, vuelvo a ella, entrelazo su mano con la mía lo que la hace sonreir y emprendemos camino. Cuando llevamos unos cuatro minutos andando dice.- ¡Niall!

-¡Dime!

-¿Me has traido a la playa?. ¡Huele a mar!.

-Chica lista jaja, pero aún no te puedes quitar la venda. Un minuto más .- Hasta que llegamos donde lo tenía todo preparado fue con una sonrisa en la cara, parecía una niña pequeña. La suelto la mano, me pongo detrás de ella y lentamente la quito la venda. Se la la vuelta y prácticamente se tira a abrazarme.- Jajaja, ¿qué pasa pequeña?.

-Niall, yo nunca había venido a la playa.- Otra de las cosas por la que me daba cuenta de que la quedan un montón de cosas por vivir.

-Pues ya estás aquí.- Mira hacia abajo donde hay un mantel puesto en la arena y unas bolsas encima con comida.

-¿Vamos a comer aquí?. ¡Ay, no me he traído el bañador!.

-Sí, vamos a comer aquí. Ruth, no hace tiempo para bañarse.- Rapidamente se quita la caamiseta, las zapatillas, calcetines y pantalones y los deja en el mantel.- No lo hagas.- No contesta, me mira y echa a correr con las manos en el aire gritando como una niña pequeña.

-Vamos Niall, entra.- Dice una vez que estaba dentro saltando las olas.

-Estás loca si crees que voy a entrar ahí.- Me acerco a la orilla y toco el agua con los dedos.- ¡Está helada!. Ruth, porfavor sal.

-Venga Nial...no seas aguafiestas. No me puedes traer a la playa y pretender que no me meta.

-Agh...- Me quito la ropa hasta quedarme con los calzoncillos y me mento poco a poco.- No puedo, Ruth.- Sin darme cuenta me coje del brazo y me tira hasta quedar a su altura.- ¡Ahora verás!.- La cojo de los hombros hacia abajo y la meto debajo del agua durante unos segundos.

-Idiota.- Dice como puede cuando sale echando su pelo hacia atrás. La cojo de los muslos y hago que enrolla sus piernas sobre mi cadera.

-Guapa.- Me abraza, me pone los labios sobre mis oido derecho y me dice.

-Te odio.

-No puedo decir los mismo.- En ese momento toda la piel del cuellos la tenía erizada, me mira a los ojos, sonríe, me da un leve beso en los labios, se baja de mi agarre y se va a la orilla. La sigo y salimos.- Tienes frío, espera.- Busco mi sudadera y hago que se la ponga. Ella entreabre las piernas, me siento entre ella y me abraza por atrás.

Narra Jade.

-He llegado, había mucha gente fuera. ¿Te he despertado?.- La verdad es que sí y estaba en mi mejor momento, hasta se me había quitado un poco el dolor de cabeza, pero ya que el pobre lo hace con toda su buena intención no iba a estar borde.

-No te preocupes.- Le sigo hasta la cocina.- ¿Qué has traído?.

-He traído pastillas para la gripe, para hacer la comida, pañuelos, termómetro y...dos comedias romáticas.- Dice sacándolas de la bolsa y enseñándomelas.- Love Actually y Amor y otras drogas.

-Awww, Harry, pero si sabes como tratar a las chicas.- Vale, no iba a ser borde, pero estar mala no significa que no me pueda reir un poquito de él.

-¿Quieres que te deje sola?.- Me encojo de hombros.- Bueno de todas maneras no lo iba a hacer.- Nos miramos los dos y acabamos riendo.

-¿Me vas a hacer la comida?.

-Sí señorita. Tú al sofá, que yo me encargo.

Hice lo que me dijo y me volví a tumbar en el sofá. Cada vez se escuchaba más ruido en la cocina, pero olía bien, asique decidí no moverme. Despues de un rato vino con dos bandejas que llevaban sopa y pescado con patatas. Durante la comida no hablamos mucho, solo lo necesario como Harry diciéndome que me tomase la pastilla y yo diciéndole que no fuese pesado. Después de comer, él se empeño en recoger mientras que yo ponía Love Actually elegida por él, en realidad es un cursi. Cuando volvió traía con el brownie cosa que me mató y por casi hasta le beso.

-Mi madre siempre me dice que cuando estás malo lo que más apetece es dulce y la verdad es que tiene razón.- Dice mientras come.

-Sí que la tiene, sí...Te has manchado Styles.- Digo riendo.

-¿Dónde?.- Pregunta.

-Aquí.- Digo señalando la comisura de los labios.

-Quítamelo.

-Já, quítatelo tú, ya eres mayorcito.

-Pero yo quiero que lo hagas tú.-sonrió pícaro mirándome.

-Que pesadito eres a veces.-dije incorporándome y pasándole el dedo donde se había manchado.


-Eh, así no vale.-se quejó y reí. Se metió un trozo más, manchándose aposta toda la boca de chocolate.- Estoy sucio otra vez.-rió.

-Igual que un bebé.-reí mirándole, dudé un momento, pero finalmente con un beso hice desaparecer el chocolate que había en sus labios.


-Mucho mejor así.-susurró cuando nos separamos, antes de besarme de nuevo. Un beso que dio paso a unos cuantos más.- La película.- Dice señalando la tele.

Narra Ruth.

-¿También has traído algo de comer?.- Pregunto cuando nos terminabamos de vestir.

- Claro, ¿qué te crees que no sé preparar una cita en condiciones? –Pregunta riendo- Solo espero haber acertado.-Había traido comida de Nandos, como no. Nos sentamos a comer mientras charlábamos un poco.- Entonces, ¿lo estás pasando bien?
-Que va, está siendo horrible.-digo.- La peor cita de mi vida.-me pongo seria.

-¿En serio? –pregunta. Le miro y empiezo a reirme


-Has picado, Horan.-digo con dificultad a causa de la risa.

-Ahora verás.-Me levanto y salgo corriendo, él hace lo mismo. Tarda unos minutos en alcanzarme pero lo logra aunque hace que ambos caigamos al suelo, él encima de mí.- Así que…-dice quedándome encima, apoyando mi peso sobre mis brazos.- lo estás pasando mal, ¿eh?


-Muy muy mal.-suelto una risita mientras mis ojos seguían mirando fijamente los suyos.

-Creo que puedo mejorarlo.-se mordió levemente el labio inferior.


-¿Y a qué esperas?-sonrio nuevamente, volviéndome completamente loca, ya no aguantaba más.

-Cierra los ojos.-dice prácticamente susurrando. Hizo lo que le pedí y acerco mi cara a la suya, haciendo que nuestros labios se juntaran por primera vez. Fue tan solo un roce al principio que dio paso, segundos después, a un beso dulce, terminando con una sonrisa por parte de ambos.- ¿Mejor ahora? –pregunta cuando nos separamos y sonrio.


-¿Por qué me gustas tanto?

-Lo mismo me pregunto yo.- Se incorpora y me coje las manos.- Ruth, he pensado que...podíamos formalizar esto, ya sabes.- Le sonrío levemente.- Ruth, ¿quieres salir conmigo?.- Me tiro a sus brazos y le abrazo.- ¿Eso es un sí?.- Asiento y nos besamos lentamente para pasar a un beso más largo.

viernes, 18 de octubre de 2013

Capítulo 23.

Narra Jade.

-Que sepas que si he aceptado a dar una vuelta contigo ha sido porque no me apetecía estar de sujetavelas.

-Pobres, déjalos. A mí me gustaría estar así con alguien.

-¡Oh, venga ya Harry!. Son unos cursis.

-¡Jade!. Niall no ha compartido su comida, mejor dicho su postre con nadie, hasta el día de hoy. Que la gente cambie sus costumbres y su forma de pensar por estar enamorado y ver sonreir a la persona a la que quiere es muy bonito. ¿No crees?.

-Si lo miras de ese modo...¿Por qué puedes ser tan diferente?.

-Dejo que veas lo que yo quiero que veas. Lo mismo haces tú.

-Es verdad. No es por chulearme, pero si quieres conseguir algo conmigo, ¿no deberías enseñarme cómo eres realmente?

-¿Eso significa que tengo una oportunidad?.- Me gustaría decirle la verdad, pero ni yo la sé. Me encojo de hombros.

-¿Te importa?

-Contestar con otra pregunta es de mala educación, señorita.- Rio con una carcajada y veo un rayo en el cielo, eso sólo significa una cosa. De repente y sin avisar empieza a llover como si no hubiera un mañana, no nos da tiempo ni a correr para taparnos, una pregunta me pasa por la cabeza y me paro en mitad de la acera, al ver que no le sigo, se para y se vuelve.

-¡Vamos Jade!. Nos vamos a empapar.

-¿¡Por qué te gusto Harry!?.- Se queda un poco parado sin saber que decir, se acerca a mí y me coje de la cintura.

-Desde que te vi aquella mañana con todas las cajas en la calle no puedo sacarme tus labios de la cabeza. Eres simpática, atenta, cariñosa, atrevida aunque luego tienes muy mala leche cuando quieres, pero eso también me gusta. Jade, desde que apareciste en mi vida, el mundo me parece un poco mejor.- Yo ya estaba con lágrimas en los ojos, pero supongo que no se me nota porque voy empapada, igual que él.

-Harry, creo que me gustas.

-Cielo, no me vale ese creo, no voy a parar hasta que me digas, Harry, te amo.- Suelto una tímida sonrisa, él me coje la mano y corriendo nos metemos en su coche.

Cuando me quiero dar cuenta Harry sin venir a cuenta se pone a reir a carcajadas, le miro sin entender y al final acabo yo también riendo con carcajadas, me mira, se acerca lentamente, me coje la cara con las dos manos y me da un beso corto en los labios.
Unos gritos suenan desde fuera, Niall y Ruth gritando.

-Uuuuuhhhuuuuu.

-Me voy Harry, ya hablamos.

-Vale, te llamo.

Narra Ruth.

-Ya te he dicho veinte veces que no ha pasado nada, ha sido un simple beso, no hay más.

-Bueno, tú sabrás. Niall me ha dicho que mañana por la mañana va a venir a buscarme para llevarme a un sitio.- Sonrío mirando hacia delante.

-¿Qué sitio?

-No sé, no me lo ha querido decir.

-Awww, que empalagoso...

-Sí, sí, pero ya te gustaría a ti con otro. Empalagoso dice, pero a saber porque está empapada.- Digo sin dejar de mirar al frente.

-Tal vez...¿por qué ha llovido?

-¿Y por qué no te has escondido?

-No te importa.

-¡Ahí lo tienes!.- Sonrío triunfalmente.

Al llegar a casa ella se mete en la ducha y después yo, al bajar al salón, dónde Jade está sentada en el sofá viendo la lista le pregunto.

-¿Has cambiado algo?

-No, te esperaba, no me veo capacitada para hacerlo sola.- Reímos. Cojo el cuaderno.

-Pon sincero.

-Vale.- Lo escribo.

-También pon romántico.

-Vale, ¿qué ponemos en Zayn?

-Amable, generoso y...reservado.- Rio mientras escribo lo que me ha dicho.- ¿Qué?.- Pregunta mirándome.

-Que se te compra muy fácil Jade, esta mañana ponías a Zayn como un Dios griego, volvemos, Harry te ha dicho no sé qué y has cambiado totalmente de opinión.

-Me voy a la cama.- Dice indignada, dejo el cuaderno encima de la mesa y vamos a dormir.

Narra Zayn.

-Creo que me precipité dejándote.

-Ya...un poco tarde para eso, ¿no?

-Nunca es tarde para el amor.

-Sí, si no es recíproco.

-¿Qué quieres decir?

-Que esto se acabó cuando tú dijiste y no se va a empezar cuando digas tú también.

-Lo siento, Zayn, me he equivocado, pero podemos ser felices.

Mentira, no había ningún amigo y lo sabía perfectamente, pero no había querido decirlo. Cuando llegué a la puerta de mi casa la vía sentada en la entrada, con la cara tapada con las manos, me vió y se levantó a abrazarme, cosa que yo respondí, pero únicamente por educación.

-No lo creo Perrie, esto ya no va a volver a funcionar, lo sé.

-Tienes razón, esto es ridículo, me voy a casa.- Era lo mejor para todos, yo no quiero volver con ella, la he querido muchísimo, pero sé que no podré volver a estar con ella como antes.

-Perrie, lo siento.- Es lo último que digo antes de meterme en casa.

Narra Niall.

-Pasa, voy a avisarla. Ya la puedes llevar a un buen sitio, lleva dos horas arreglándose, ¡dos!.- Reímos y digo.

-Descuida, ya verás como la gusta.- Cuando sube las escaleras decido sentarme en el sofá a esperarla, cuando de refilón veo en un cuaderno el nombre de Harry, lo que hace que me entre la curiosidad, miro hacia las escaleras para asegurarme de que no bajan, cojo el cuaderno y leo las cosas que han escrito describiéndole, pero ahí no acaba la cosa paso la hoja y también leo apuntes que describen a Zayn. Me quedo un poco parado, ¿por qué hacen esto?. No me gusta, me parece dañino, voy a hablar con Ruth, aunque sé que tiene que ver con Jade. Rapidamente lo dejo ya que se las oye que bajan las escalera, me levanto y me dirijo hacia la entrada a esperarla.

-Hola, ya estoy, cuando quieras nos vamos. Jade, no sé cuando volveré, si pasa algo llámame.- Me rio hacia dentro, se la ve que está muy nerviosa.

-Cariño, no te voy a comer, relájate.- La acerco a mí pasando una mano por su cintura, me coje la cara con las dos mano y nos damos un pequeño beso.

-Hala, iros ya, pesados. Pasarlo bien.

Capítulo 22.

Narra Ruth.

Me despierto porque tengo la piel del cuello erizada a causa de las suaves caricias que alguien al lado de la cama me está dando, sonrío aún con los ojos cerrados y de forma tranquila me doy la vuelta para mirarlo.

-Buenos días.- Me dice sonriente. Mira que él siempre está guapo y adorable, pero hoy tiene un brillo en los ojos que nunca antes había visto, cosa que hace que tenga mucha ilusión.

-Buenos días.- Le acaricio el mentón.

-¿Qué tal has dormido?

-Muy bien, ¿y tú?.- Me siento a horcajadas en su abdomen y le miro.

-Ojalá siempre durmiera así de bien acompañado.- Con sus manos busca las mías y las entrelaza.- ¿Qué quieres hacer hoy?.

-Mmmm...no sé...¿qué propones?.- Antes de que conteste decido acortar distancias, pero antes de que acabe besándolo se gira levemente rechazándolo. No entiendo nada.- Bueno, ahora que me acuerdo le dije a Jade que iría a comer con ella a casa.- Digo mientras me bajo y me visto con la ropa de anoche.

-Vale...pues si quieres te acompaño.- Si antes no entendía nada, ahora ya ni me parece que el asunto no va conmigo.

-Hola me llamo Ruth y tú Niall, estamos en el mundo real, ¿ha pasado algo y no me he enterado?.- No contesta.- ¿Niall?.

-Ruth, ¿tú estás segura de esto?.

-No te entiendo, Niall...- Se acerca a mí, me coje las manos, suspira y me dice.

-A ver, todo lo que te dije ayer es cierto, pero luego estuve pensando. Yo no quiero que lo pases mal por el tipo de vida que llevo, es mucho tiempo fuera, la prensa, los rumores, los haters. Ruth, yo no quiero que lo pases mal por mi culpa, no me lo perdonaría nunca.

-Pero Niall, yo soy fuerte, siempre lo he sido y cinco tonterías como estás no me van a hacer ningún daño.

-Lo dices como si en la vida te hubieran pasado cosas más graves.

-Ya...me voy ya.

-Espera que me voy contigo.

-No, no Niall cojo un taxi no te preocupes, en serio.

-¿Segura?.

-Sí cariño, por la tarde te llamo. Te quiero.

-Yo también te quiero.- Me acerca a él, me besa cortamente los labios y yo lo alargo un poco más.

Salgo de su casa y me subo ene el taxi que me estaba esperando. La mañana ha sido un tanto extraña, me gusta que se preocupe tanto por mí, si me pasara algo no puedo decir que no me molestara aunque fuera un ápice pero después de lo vivido no me parecería tan grave. ¿Debería contárselo?, tengo dudas, no es que no confíe en él, lo hago, más que en mí si cabe, pero me da miedo por varias cosas como el rechazo o por que me tenga lástima y se vea atado a mí, yo no quiero eso por nada del mundo.

Narra Jade.

-Hola.

-Hombre, ¡hola!. ¿Qué tal ayer? eeh, pillina..- Esto último lo digo con algo de picardía.

-Muy bien, pero no es nada de eso que piensas, sólo dormimos, abrazaditos, pero dormidos jaja.

-Bueno...¿pero qué tal?, ¿ya estáis juntos?

-Muy bien, hasta que me ha dicho que tiene miedo por la prensa y esas cosas, le dije que no me importaba y me contestó que parecía que lo había pasado mal en otro momento.

-¿Se lo contaste?

-No soy capaz Jade, me da muchísimo miedo y ¿si me ve de otra manera después de contárselo?.-Subimos las escaleras, mientras yo coloco mi habitación ella se queda en el marco de la puerta esperando mi opinión.

-Cari, estamos hablando de Niall, te quiero y es un trozo de pan. Desde que lo conociste te ha dicho las cosas claras.

-Ese es el problema, ¿y si no me lo ha contado todo?.

-Pues ya te lo contará poco a poco. No le puedes juzgar por eso porque tú también lo estás haciendo.

-Ya, eso es cierto. Lo mejor será que deje pasar las cosas y cuando encuentre el momento ya hablaremos.

-Dí que sí, no hagas como yo que estoy amargada.

-¿Zayn?.- Me encojo de hombros.- ¿Harry?.- Hago un movimiento de más o menos con la mano.- ¡Oh dios mío! ¡Te gustan los dos!.

-Ni lo sé.

-Haz una lista de los pros y contras. Vamos, te ayudo. ¿Dónde tienes un cuaderno?.- Se sienta en el escritorio, cojo un cuaderno del cajón y un bolígrafo de la mesa y me siento en la cama. En una hoja escribo Zayn, hago dos columnas, en una pongo pros y en otra contras y en otra hoja igual pero con el nombre de Harry.

-Empiezo por los pros de Zayn. Es cariñoso.

-No te gasta bromas pesadas, mira esa sirve también para los contra de Harry.- Río con una carcajada.

-Atento.

-Sí, se preocupa mucho por ti aunque eso también puede servir como contra, puede llegar a ser bastante pesado.

-Guapo.

-Sí, Jade, hija, Harry está para que le pongan una bolsa en la cabeza.

-Bueno, también se lo pongo a Harry.- De repente se levanta abre la ventana y me mira señalando a la ventana de Harry.

-Hablando del rey de Roma, por la ventana asoma. ¡Macizo!.- Esto último lo dice gritando para que llegue a Harry, quien estaba asomado a la ventana.

-¿Qué tramáis ahí las dos?.

-Pues Jade que está bastante indecisa...- Ruth recibe un codazo de mi parte, me acerco más a la ventana y le digo a Harry.

-¡No te importa, cotilla!.- Meto a Ruth para dentro y cierro la ventana.- Tía, no le cuentes esto a nadie que te mato.

-Si no se lo iba a decir, era para ver como reaccionabas.

-Claro, claro. Bueno, luego seguimos con esto que la comida no se prepara sola.

Después de comer, recogimos y nos sentamos a ver la típica película que echan en la tele el fin de semana a la hora de la siesta y la ves porque no se te ocurre nada más productivo para hacer. En un momento, el móvil de Ruth sonó, esta se levantó sin ganas y lo cogió.

-Ah, ¡hola!. Sí, bueno si insistes...jaja. Vale, espera que se lo pregunto.- Se separa un poco el móvil de la oreja.- Jade, es Ell, que si quieres que vayamos esta noche a cenar todos.

-¿Todos de todos?

-Sí.

-Vale, dila que sí.

-Ell, sí. ¿Dónde vamos?. Vale allí estaremos a esa hora. Un beso, hasta luego.

Cuando iba llegando la hora las dos nos duchamos y nos arreglamos para salir, se podría decir que estábamos hechas flanes, cada una por la parte que le toca y no es por chulear, si no todo lo contrario, pero yo tengo doble parte y esta situación cada día la controlo menos.

Narra Harry.

Estamos todos alrededor de la mesa, solo faltan Jade y Ruth, dos chicas juntas en una casa arreglándose nunca sale bien, está demostrado.

-Chicos, si quiereis vamos pidiendo ya.- Dice Louis, viendo que llevan como veinte minutos de retraso.

-¡No!.- Niall, Zayn y yo le decimos a la vez mandándole una mirada asesina.

-¡Qué miedo!. Me callo, me callo.

-Mirad, ya llegan.- Dice Danielle. Miro a la puerta y la veo hablando con el metre que las acompaña hasta la mesa. Está guapísima, con su pelo suelto y sus piernas largísimas, pero lo más importante hoy lo lleva bien marcado, la sonrisa. Genial, por quedarme embobado con ella Zayn se me ha adelantado, pero ya se saben lo que dicen, los últimos serán los primeros.

Después de un beso bastante cariñoso diría yo y un abrazo se acerca a mí y la digo.- ¿Te hacías de rogar?.

-Puede.- Se sienta a la mesa con todos los demás y me siento a su lado, a su izquierda está Zayn.

-No deberías juntarte tanto conmigo, luego mira lo que te pasa.

-Tal vez.

-¿Tanto te he impresionado hoy que no puedes decir más de dos palabras a la vez?.- Mierda, ¿qué digo?. Luego me quejo de que se enfada.

-¡Ruth!. Apunta, creído.

-¡Lo tengo!.- Le contesta la pelirroja. Todos las miramos extrañadas pero lo dejamos pasar.

El camarero trajo la carta y todos empezaron a coger hasta que nos dimos cuenta que de Jade no tenía, Zayn pasa un brazo por sus hombros y la dice.

-Ven, mírala conmigo, no me importa.- Ella sonríe, acerca su silla a él y con el brazo aún rodeándola empiezan a mirar la carta. Aguanto un par de minutos, hasta que ya no puedo más con la rabia y los celos y digo medio gritando.

-Bueno, vamos a pedir ya, que os estáis recreando.

Después de un silencio general y algunas miradas entre unos y otros, pedimos y en poco tiempo nos traen la comida.

Narra Niall.

-Vuestro pico al venir Ruth no se nos ha pasado, ¿qué tenéis?.- Pregunta Eleanor picaramente.

-Mmm...no sé sabe.- Contesta Ruth con una sonrisa tímida. Lo que hace que Harry y Jade no puedan aguantar la risa.

-¡Dejadla en paz!.

-Uooh Niall, como la defiendes...- Dice riendo Louis, lo que hace que me ponga rojo.- No te pongas así Niall, porque cuando la estabas comiendo la boca bien que te hacias el machote.

-¡Louis!.- Le dice Liam a modo de regaño.

-Vale...perdón chicos.

-Bien, cenemos en paz.- Dice Danielle relajando los ánimos.

El resto de la cena pasó tranquilamente, cada uno estaba un poco más atento a su pareja, excepto Jade, que tenía que estar atenta de dos, los cuales parecían niños pequeños cuando quieren hacer ver que son mejores que los demás. Al terminar de cenar, como no, soy el único que pide postre.

-Chicos si queréis iros, que yo no sé lo que voy a tardar en comerme esto.- Obviamente quiero que se vayan para quedarme con Ruth a solas pero siempre hay alguien que la tiene que liar.

-Yo me tengo que quedar, vine con ella, me voy con ella. Anoche ya me la quitaste.- Me dice Jade señalándome con el dedo.

Total que Liam, Danielle, Louis, Eleanor y Zayn se fueron. Zayn no quería irse sin Jade pero un amigo le llamó diciendo que lo quería para no sé qué. Yo diría que se despidió de ella con un beso bastante cerca de la boca, pero llamarme loco.

Narra Jade.

-Jade, ¿vamos a dar un paseo mientras ellos terminan?.- Me pregunta Harry con una sonrisa.

-Está bien, vamos.